viernes, 22 de julio de 2016

HAN PASADO 45 AÑOS

HAN PASADO 45 AÑOS "Una reflexión en el camino"
Por Guillermo Ávila


Han pasado 45 años desde aquel lejano  Diciembre de 1971, cuando un grupo de estudiantes entre 15 y 17 años, llenos de energía, alegría y entusiasmo, cruzaban las puertas del Colegio Integrado de Talca, con el propósito de enfrentar los desafíos de la vida. 
Cada uno emprendió  distintos sueños, con distintas expectativas y posibilidades que la vida y la familia les pudieron ofrecer. 
Desafío que  todo joven que concluye su enseñanza media debe enfrentar.

Han pasado 45 años, que no son pocos, y ellos han escrito en cada uno una historia diferente; una historia cargadas de aventuras, desafíos, sacrificios, alegrías y también  penas. 
Han  pasado 45 años, y han sido años acompañados de logros, fracasos y frustraciones, penas y alegrías; porque la vida es así; y es a través de ellas, que somos desafiados a crecer y a madurar.

Han pasado 45 años, y hoy muchos son profesionales, son empresarios, actores laborales en distintas áreas del quehacer de la vida, donde algunos han hecho del deporte, de la educación, de las artes, o de las ciencias su vocación.
Muchos han formado familias, y la vida les ha otorgado la satisfacción de ser padres, y abuelos. 

Sin duda que a nuestra corta edad, 1971, no podíamos dimensionar lo frágil e incierta que pudiera ser la vida para algunos.
Así fue como con tristeza, nos enteramos de la partida prematura de Daniel, de Cesar y de Grace, quienes vieron frustradas sus vidas en medio del camino, sin disfrutar y desarrollar lo que nosotros pudimos alcanzar.

Han pasado 45 años, y para algunos la vida ha sido dura, con más obstáculos por superar; por problemas de salud, por algún accidentes, crisis económica, la partida de un ser muy querido, o un divorcio que siempre es y será doloroso.
Todos hemos experimentado en alguna forma el dolor, las lágrimas, que fue lo primero que aprendimos en la vida, pero sin duda es allí y a través de ellas, donde aprendemos a valorizar lo correcto, y los buenos momentos que la vida nos ofrece; como era difícil a nuestros 17 años vislumbrar el viajar y conocer otras latitudes, o establecer una familia en tierras lejanas.

Algunos corrieron demasiado rápido y tomaron decisiones apresuradas, que con los años sufrieron las consecuencias; otros fueron muy lentos, y dejaron pasar mas de una alguna linda posibilidad.
pero sin importar donde nos encontremos, siempre habrá una posibilidad de volvernos a levantar.

Han pasado 45 años, y hemos vivido muchas experiencias que nos han sido comunes, como formar una familia, tener hijos, ver nacer un sobrino, un nieto, ser tío o abuelos,  la pérdida de un ser amado, o desarrollar una linda amistad.

Algunos hemos enfrentado la muerte más de una vez cara a cara, y solo por la gracia de Dios,  hoy podemos contar nuestra historia, son nuevas oportunidades que nos ofrece Dios y la vida, para aprender a priorizar, para remediar algún mal, o enmendar el buen camino. 

Han pasado 45 años, y son muchas las historias por contar; pero lo más importante es cuánto hemos logrado madurar, hemos logrado aprender; para traspasar un patrimonio de amor y de valor, que enriquezca la próxima generación.

HAN PASADO 45 AÑOS y me pregunto: 

¿He aprendido a ser más humilde, menos soberbio, menos orgulloso?
¿He aprendido a amar y a perdonar?
¿He aprendido a escuchar y comprender a los demás?
¿He aprendido a servir?

Que bella es la vida, un regalo de Dios; sin duda la vida es la mejor escuela y aspiramos la mejor graduación.

Han pasado 45 años, que no solo nos han permitido recordar, sino también reflexionar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario