lunes, 24 de junio de 2019

TU DEBILIDAD NO ES UN IMPEDIMENTO PARA TU FE


TU DEBILIDAD NO ES IMPEDIMENTO PARA TU FE "Una Reflexión en el Camino"
por Guillermo Ávila

Leí una hermosa reflexión de una joven en facebook, quién expresaba públicamente y con mucha sinceridad la realidad de su vida; su conflicto en su naturaleza humana frente al amor del Padre revelado en Jesús, el amor de su familia, y su relación con sus semejantes.
Ella expresa su sincero deseo de agradar a Dios, a sus padres, y tener paz consigo misma.
En sus sinceras palabras me sentí muy identificado, y creo que si las hubiera leído Abraham, Jacob. Moisés, David o el apóstol Pablo, también se habrían sentidos identificados y comprendidos.
Yo quisiera siempre estar rodeado de personas como esta joven, con un corazón tan sincero y libre de hipocresía frente a los desafíos y conflictos de la vida, sabiendo que todos somos solo barro, sin ningún valor en nosotros mismos, pero consientes del tesoro de incalculable valor que Dios ha depositado en nuestros corazones, como lo expresa el apóstol Pablo: "Tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros"
Sabemos que frente a las flaquezas y debilidades de nuestra naturaleza humana, no tenemos en nosotros mismos el poder para vivir victoriosos; solo la gracia de Dios lo hace posible como lo declara el apóstol Pablo: "Frente a la grandeza de las revelaciones del amor de Cristo, para que no me exaltara desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, respecto a lo cual Dios sabe que es así, he orado con angustia tres veces para que lo quitara de mí, y me ha dicho: ¡Bástate mi gracia! porque mi poder se perfecciona en las debilidades"
Pablo anhelaba  como nosotros, ser libre de ese conflicto que humillaba su carne, pisoteaba su orgullo, y lo hacía sentirse un hipócrita en su fe frente a los demás, condición que Satanás utilizaba para abofetearlo, recordándole lo indigno e inmerecedor que era de la gracia de Dios.
Como también se escribe respecto al profeta Elías : «Elías era un hombre sujeto a debilidades y pasiones semejantes a las nuestra, pero oro fervientemente para que no lloviera sobre esta tierra, y los cielo se cerraron, e inclinó el corazón de su pueblo al temor a Dios»
Sus debilidades no fueron un impedimento para su fe, y para servir a Dios, fue el medio, para que Dios la hiciera crecer y madurar en su vida.

¿Cómo vivir entonces con este conflicto?

Dejando de luchar por ser mejores, aceptando la debilidad de nuestra naturaleza humana como una realidad de la vida, y permitiendo que su Gracia haga su obra en nosotros.
Es la obra del Espíritu de Dios en la vida de los hombres.
Su Gracia es suficiente para suplir todas nuestras debilidades; y nuestra debilidades son la oportunidad, para que Dios haga reposar su poder en nosotros.
Dios da gracia a los humildes.
Nuestras debilidades son el medio, para que su revelación sea una realidad en nuestras vidas, porque cuando soy débil, entonces soy fuerte, porque su fortaleza es nuestra fuerza, y la fe es un don de Dios, que nos permite apropiarnos de ella.
LA FORTALEZA DEL SEÑOR, REPOSA SOBRE LA DEBILIDAD DE LOS HOMBRES.
¡BÁSTATE MI GRACIA!
Entenderlo, me hace comprender el conflicto de los demás, considerarme a mi mismo, y ayudar a los demás a alcanzarla.
No entenderlo, me hará un "religioso" egoísta, competitivo y condenador de las flaquezas de los demás, como lo fueron los fariseos, olvidando que Jesús no vino a condenar a los hombres, sino a salvarlos, a socorrerlos, con el propósito de restaurar en ellos su diseño divino.
Jesús es el Salvador del mundo.

1 comentario:

  1. Gracias! Amado de mi alma por que en mi debilidad tu te glorificas para ponerte en la posición que tu te merecés mi Rey, gracias por esta reflexión siempre la palabra hace algo sobre natural en mi trayendo vida.

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